Los grupos de la oposición en Santa María de Cayón, PRC, PSOE y AIPC, han exigido públicamente hoy explicaciones al alcalde, Gastón Gómez, sobre un pago de 1.648 euros reintegrado al Ayuntamiento por “su amigo personal” Juan Badolato, ex director general del Gobierno de Cantabria y miembro de la Ejecutiva del PP, después de haberlo facturado por la dirección técnica de la obra del nuevo aparcamiento de autobuses en el colegio público.
Los representantes de los tres partidos han cuestionado que esta situación responda a “un error”, como ha justificado el propio Badolato, máxime después de haber constatado que el Ayuntamiento ha abonado otra factura por el mismo servicio e importe a otro técnico, que “casualmente es familiar directo del amigo del alcalde”.
Además, han recordado que no es la primera vez que se produce una situación similar, dado que el Ayuntamiento ya abonó tiempo atrás facturas a un restaurante de Santander a nombre de Badolato, quien posteriormente devolvió el importe, después de que la oposición denunciara los hechos y pidiera la dimisión del alcalde por posibles delitos de prevaricación y malversación de caudales públicos.
De hecho, el ex alto cargo del Partido Popular tuvo que acudir a declarar por estos hechos ante el Juzgado de Medio Cudeyo, que instruye la causa abierta contra el regidor, donde negó haber cobrado cantidad alguna del Ayuntamiento, pese a que escasos días antes el equipo de Gobierno había aprobado una lista de facturas entre las que figuraba una a su nombre.
La oposición de Cayón considera que este hechos y la nueva devolución de dinero realizada por Badolato “demuestra el descontrol en la gestión” que existe en el Ayuntamiento. “Parece que el dinero entra y sale sin ningún rigor y de una forma más que sospechosa en demasiadas ocasiones”, ha asegurado los portavoces de las tres formaciones políticas, Ana Obregón (PRC), Luis Alfonso Gutiérrez (PSOE) y Ramón Terán (AIPC).
A su juicio, el reintegro de la última factura “obedece fundamentalmente al miedo”, ya que creen que Badolato “ha podido incurrir en un delito al prestar en el juzgado una declaración falsa y llena de contradicciones”.
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