El secretario general del Partido Regionalista de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha tomado hoy posesión del cargo como presidente de Cantabria por tercera vez, prometiendo “honradez y trabajo para mejorar la vida de los cántabros”.
El patio central del Parlamento cántabro ha acogido el acto institucional de toma de posesión de Revilla como presidente. Un acto que ha contado con la asistencia del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, y de alrededor de 400 personas entre autoridades civiles y militares, así como familiares y amigos personales de Miguel Ángel Revilla.
En su intervención, Revilla se ha comprometido a dirigir un Gobierno con la “honradez como bandera”, cuyo objetivo se centrará en que los “ciudadanos vivan mejor cada día”.
Para ello, ha prometido “trabajo”, “recibir” y “escuchar a todo el mundo” y acudir a los lugares que “le inviten” porque, en su opinión, un político no puede estar en una “urna” o en su despacho.
Aseguró, además, que su Gobierno “va a ser leal con Madrid, pero extremadamente reivindicativo. No pedimos tantas cosas, solo las que tienen los demás”, ha subrayado.
En este sentido, ha reiterado que reclamará al Gobierno central un tren mixto (pasajeros y mercancías) de “altas prestaciones” entre Santander y Madrid que potencie el puerto, de alta velocidad “al menos” entre la capital del Estado y Reinosa, al que “no va a renunciar”; el pago íntegro de las obras de Valdecilla, un “hospital nacional”; y una financiación de las comunidades autónomas que atienda la “singularidad orográfica” de Cantabria, que incrementa los costes de cualquier obra.
Asimismo, al igual que hiciera en su discurso de investidura, ha vuelto a incidir en la importancia de la industria, “que se nos ha caído”, como generadora de empleo.
Por otra parte, Revilla ha defendido el pacto, “de pura lógica”, suscrito con el PSOE para gobernar Cantabria los próximos cuatros años. “Hemos interpretado el mandato de las urnas”, ha sostenido.
Y ha hecho hincapié en que será un presidente “cercano, sencillo y trabajador”, todo ello para “defender a esta tierra”. “Garantizo trabajo, desde las ocho de la mañana hasta las diez de la noche”, ha subrayado.
De hecho, ha puesto como ejemplo la agenda prevista para este jueves en la que, después del traspaso de poderes con Ignacio Diego, tiene concertadas entrevistas con el presidente de la CEOE, Lorenzo Vidal de la Peña; los líderes de UGT y CC OO, María Jesús Cedrún y Carlos Sánchez, respectivamente, y también con el comité de empresa de Sniace, así como una visita a la Cocina Económica.
Por último, Miguel Ángel Revilla ha pedido “sobre todo los compañeros de partido” ayuda para afrontar una situación “difícil”. “Espero irme dentro de cuatro años con la cabeza alta”, ha concluido.
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