El diputado y portavoz del PRC en materia de Medio Ambiente, Guillermo Blanco, defenderá una moción en el Pleno del lunes para instar al Gobierno de Cantabria a aprobar en el plazo máximo de cuatro meses la actualización de la Estrategia de Cambio Climático de Cantabria, y avanzar "de forma decidida" en el desarrollo de la Estrategia de Economía Circular.
La moción deriva de la interpelación parlamentaria planteada por el Grupo Regionalista esta semana para alertar y pedir explicaciones al Ejecutivo ante el retroceso progresivo de las playas cántabras, el impacto creciente de los temporales y la pérdida de biodiversidad vinculada al cambio climático.
"En 2040 las playas de la Cornisa Cantábrica habrán perdido una media de tres metros de anchura. Y eso en Cantabria afecta directamente a espacios como Tina Menor, Oyambre, Suances, Liencres, Santander, Somo, Santoña o Castro Urdiales", ha advertido el diputado regionalista.
Durante el debate del pasado lunes, Blanco preguntó al consejero de Fomento y Medio Ambiente, Roberto Media, por el estado de la nueva estrategia anunciada hace más de un año y adjudicada a una empresa externa, sin que hasta el momento "se conozcan avances tangibles ni plazos concretos".
"El Gobierno no puede seguir de perfil mientras la erosión costera avanza y el territorio pierde capacidad de defensa natural frente a los efectos del cambio climático", ha opinado el parlamentario.
Por ello y dado que el consejero "se limitó a decir que el Ejecutivo está trabajando, pero no ofreció detalles ni medidas específicas para frenar el retroceso del litoral ni para adaptar los ecosistemas costeros", el PRC ha planteado una nueva iniciativa para poner plazos y urgir la puesta en marcha de las acciones necesarias.
Blanco considera "imprescindible" que el Gobierno asuma "un plazo claro y un compromiso verificable para aprobar el documento actualizado y aplicar medidas concretas en el marco de la economía circular, la protección del territorio y la mitigación climática".
Esta iniciativa es, en palabras del también ex consejero de Medio Ambiente, "un toque de atención necesario ante la parálisis del Gobierno en uno de los principales desafíos ambientales de Cantabria".