Apuntan que el 77% de las 138 medidas que recoge dicho plan no son medidas para paliar los efectos de la pandemia, es decir, más de 45 millones de euros de los 60 empleados, son ajenos a un Plan de emergencia COVID
El grupo municipal regionalista en el Ayuntamiento de Santander ha calificado esta mañana en rueda de prensa de “fraude” y “estafa”, el II Plan de Choque presentado por PP-CS puesto que consideran que viene a encubrir “un presupuesto B” o “extraordinario”.
Según los regionalistas el dinero destinado para este plan, 60 millones de euros, “no va donde tiene que ir” a lo urgente dada la situación actual, sino a cubrir lo que en el presupuesto municipal no les cupo al equipo de gobierno, es decir, “a atender todas las partidas que cada concejalía ha considerado necesarias y que no tenían cabida en el presupuesto inicial y ahora con los remanentes lo pueden encajar”, algo que no les sorprende ya que se lo imaginaban de un presupuesto “cocinado” y “encorsetado” que llevan meses reclamando y que no se ha tenido a bien configurarlo y armarlo desde el consenso .
El portavoz regionalista, José María Fuentes-Pila, detalló que de las 138 medidas que conforman el plan, 73 medidas por un valor cercano a los 46 millones de euros, no tienen que ver con el COVID y 66 medidas si estarían destinadas a atender la emergencia, cerca de 14 millones.
En este sentido explicó que en dicho plan se ha incorporado más de 16 millones de euros en proyectos que iban a ser financiados con préstamos, según el anexo de inversiones del presupuesto municipal y que fue aprobado en pleno con el voto de calidad de la alcaldesa, y ahora se ejecutarán con los remanentes “como si esto fuera un juego de trileros”.
Igualmente apuntó a otras medias como en urbanismo donde aparecen concursos de ideas o planes directores, se introduce un plan de asfaltados por medio millón, y cerca de 5 millones de euros para “Obras de urbanización de la ciudad”, bajo un epígrafe idéntico al que se establece en los presupuestos, un cajón “desastre” que vale para todo, “por no hablar de otras medidas como un Scape Room, “Santander en forma” – el conocido metropie- o el Concurso de ornamentación navideña”.
“Lamentablemente la falta de ideas y capacidad de actuación de estos dos gobiernos PP-Cs frente a las necesidades de la ciudad en el ahora y en el futuro cercano, de nuevo vuelven a plasmarse y Santander pierde una oportunidad “extraordinaria” para poder emplear unos fondos adicionales en lo urgente e ir concibiendo además un modelo de ciudad con una mirada ambiciosa”, apuntó.
Por ello frente a este “escarnio” económico con los remanentes, el PRC considera fundamental medidas que tengan un carácter de “choque” en el ámbito social y en las ayudas directas, en acciones vinculadas al apoyo a los sectores económicos concretos más afectados y en los cuales existe una mayor vulnerabilidad. “Creemos necesario contribuir a paliar los efectos que la crisis está teniendo en las personas, en el ámbito económico y del empleo y en la cultura de nuestra ciudad. Medidas que incidan de forma directa y tangible en las necesidades de las personas y las empresas, que atiendan temas como la conciliación, el apoyo a los mayores, a la salud, a los jóvenes y que vertebre acciones transformadoras y sobre las que estamos trabajando para presentárselas al equipo de gobierno”.
En este sentido, el PRC pedirá a PP-Cs que reconsidere paralizar los tiempos, “ya que no podemos admitir que los remanentes se pongan al servicio prácticamente del gasto corriente” y poder aprobar un plan que recoja medidas urgentes que atiendan necesidades reales, “lo que es un verdadero plan de choque”, y que sea eso lo que se debata en el próximo pleno extraordinario. Junto a ello que se establezca una mesa de trabajo para un estudio consensuado con el resto de los grupos de la oposición sobre el qué hacer con la diferencia de remanentes, “ya que Santander no se merece ser maltratada por sus propios gobernantes”.
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