La alcaldesa, Lidia Ruiz Salmón, y el concejal de Hacienda, Pedro Pérez Noriega, han presentado el borrador del presupuesto de Torrelavega para este año. Un borrador, ha afirmado, que cumple con todas las premisas en que se basó el cambio en el gobierno de Torrelavega: “la transparencia, la participación, el carácter social y el empleo, y la reivindicación”.

En concreto, han resaltado que, por primera vez, se presenta a los grupos municipales y a la Unión Vecinal un documento “abierto” en el que es posible incluir aportaciones y con el que se pretende “hacer un mejor presupuesto en el que haya el mayor consenso posible”. La intención, han anunciado, es que el presupuesto esté aprobado antes de Semana Santa.

En este sentido, han avanzado que los representantes de la Unión Vecinal serán los encargados de decidir en qué gastar los 400.000 euros destinados a Barrios. También han llamado la atención en otra novedad relacionada con el empleo y con el carácter reivindicativo que está caracterizando al equipo de gobierno de PSOE y PRC: la consignación de una partida de 300.000 euros destinada a la puesta en marcha de proyectos municipales encaminados a la creación de empleo. Unos proyectos, han matizado, para cuya ejecución será necesaria la implicación del Gobierno de Cantabria debido a que la nueva ley de haciendas locales limita las competencias municipales en este aspecto.

Respecto al aspecto social, han anunciado que se duplica el presupuesto destinado a ayudas sociales, y se han comprometido a que, al contrario que ocurrió con el gobierno de Calderón, “se va a gastar todo el dinero presupuestado”.

INVERSIONES Y DINERO PARA LOS BANCOS

En cuanto a las inversiones, tanto Ruiz Salmón como Pérez Noriega, han confirmado que “se van a gestionar los compromisos del anterior equipo de gobierno por responsablidad y pese a que alguna de esas actuaciones no son compartidas”. También han garantizado que las obras se van a ejecutar “en tiempo”

Entre las inversiones, han destacado por cuantía las relacionadas con el Urban, la segunda fase de las pistas de La Lechera o la urbanización de la calle El Cid.

Sin embargo, tanto al alcaldesa como el responsable de Hacienda han lamentado que el capítulo de inversiones se haya visto reducido en 2 millones de euros debido a que Calderón no quiso realizar la modificación presupuestario que hubiese evitado que ese dinero vaya a “·pagar a los bancos” en vez de a obras necesarias para la ciudad.