La alcaldesa de Comillas urge la segunda fase de la rehabilitacin de la Pontificia tras desplomarse parte del claustro occidental

Noceda pide una reunin urgente al Gobierno y le reclama que ponga en marcha las obras "de inmediato" para evitar "la ruina" del edificio

7 Mayo 2012
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La alcaldesa de Comillas, María Teresa Noceda, ha urgido hoy al Gobierno de Cantabria a poner en marcha la segunda fase de la rehabilitación de la antigua Universidad Pontificia, tras el desplome sufrido el pasado 29 de abril y que ha afectado a un tercio de la pastilla norte del claustro occidental.

Noceda ha lamentado el “secretismo” que el Ejecutivo ha mantenido en torno a este suceso, del que el Ayuntamiento solo ha tenido conocimiento de forma indirecta y porque es visible desde determinados puntos del municipio, por lo que ha solicitado una reunión urgente a la consejera de Economía y Hacienda, Cristina Mazas, con el fin de conocer lo ocurrido “de primera mano” e instarle a actuar “sin más demoras” para evitar “la ruina” del resto del inmueble no restaurado.

En este sentido, ha recordado la situación “muy preocupante” en la que se encuentran las estructuras y la cubierta de la iglesia, cuya rehabilitación ya tenía que haber comenzado, pero permanece “inexplicablemente paralizada y sin fecha de inicio”.

Según el proyecto diseñado por el anterior Gobierno PRC-PSOE y tras la recuperación del claustro este, el vestíbulo y el paraninfo, quedan aún pendientes dos fases más: la segunda, con una inversión estimada de 24,5 millones de euros, para rehabilitar las fachadas, la cubierta de la iglesia y el claustro oeste; y la tercera, para recuperar el interior de la iglesia, con un presupuesto en torno a los 4,7 millones.

Aunque el actual Ejecutivo del PP se comprometió a continuar y culminar este proyecto, la alcaldesa de Comillas se ha declarado “alarmada y muy preocupada” tras conocer el desplome ocurrido hace algo más de una semana, ya que “lo único cierto en este momento es que las obras están paradas y no hay ningún indicio de que se vayan a poner en marcha en un horizonte cercano”.

“Espero que el Gobierno tome cartas en el asunto de inmediato para no tengamos que lamentar una pérdida irreparable en uno de los conjuntos arquitectónicos más valiosos y reconocidos del patrimonio histórico de Cantabria”, ha concluido.