El PRC augura que el PP “tendrá que pedir perdón como Cameron” si persiste en la privatización sanitaria en marcha

Solanas insta al Gobierno de Diego a “desistir” de la aplicación del modelo de gestión británico tras confirmarse que ha costado la vida a cientos de ciudadanos

Noticias PRC 10 Febrero 2013

La portavoz del PRC en materia sanitaria, Conchi Solanas, ha augurado hoy que el
Gobierno tendrá que pedir perdón, como ha hecho esta semana el primer ministro
británico, David Cameron, si persiste en trasladar a la Comunidad Autónoma el
modelo de gestión sanitaria que antepone el ahorro a la calidad asistencial y que
en el Reino Unido ha costado la vida a cientos de ciudadanos.
Solanas ha instado por ello al Ejecutivo a “desistir” de su actual política sanitaria,
una vez demostrado que el modelo británico en el que está basada “ha sido un
terrible fracaso y ha obligado incluso al primer ministro a pedir disculpas públicas
a la ciudadanía”.
“Desde el PRC llevamos meses advirtiendo al Gobierno de Cantabria del coste
terrible que pueden llegar a tener sus políticas y ahora, a la vista de lo ocurrido en
el Reino Unido, empieza a evidenciarse que tenemos razón”, ha asegurado.
En este sentido, ha reafirmado su rechazo a los recortes aplicados en la sanidad
cántabra, con el cierre de las consultas de Atención Primaria por las tardes, la
reducción de los días de consulta en consultorios como el de Herrerías o la
concentración de las urgencias en los grandes núcleos urbanos, caso de Campoo,
donde a partir de las 15,00 horas sólo se atienden casos urgentes en el Hospital
Tres Mares.
Además de subrayar que se está reduciendo la accesibilidad a la Atención Primaria,
la diputada regionalista ha abogado por regresar al sistema “universal y de
calidad” que distinguió a la sanidad hasta la llegada del PP a Puertochico, porque
de lo contrario “las negligencias espantosas que han sufrido los pacientes de algún
hospital público del Reino Unido empezarán a producirse también en Cantabria”.
A su juicio, lo ocurrido en un centro sanitario del centro de Inglaterra, donde los
enfermos llegaron a ser privados incluso de agua y alimentos y que se tradujo en
una altísima tasa de bajas mortales, es “la cara trágica de lo que supone gestionar
la atención sanitaria anteponiendo los criterios económicos a las consideraciones
médicas”.
“No queremos ni pensar que algo similar pueda llegar a pasar en Cantabria”, ha
recalcado Solanas, para quien las reformas sanitarias aprobadas en el Real Decreto
Ley 16/2012 “se basan precisamente en ese modelo del Reino Unido que tantas
deficiencias ha demostrado en cuanto al cuidado de la salud de los pacientes”.
Finalmente, ha subrayado que “los grandes perdedores” de esta situación son los
ciudadanos, porque “se van a ver obligados a pagar para poder utilizar los recursos
asistenciales y una parte de la población, la más pobre y la más enferma, está
siendo excluida con esta reforma sanitaria”.