Santillana del Mar, 25 feb (EFE).- El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha asegurado hoy que la variante Puente San Miguel-Santillana del Mar-Suances acabará con uno de los mayores puntos negros de la región y también con las colas kilométricas que se formaban cada verano para acceder a la villa marinera.

En un encuentro con periodistas durante la inauguración de la carretera que conecta la variante de Santillana del Mar con Suances, Revilla ha asegurado que esta zona de Cantabria tendrá en unos meses "la mejor red viaria de la región", cuando se ponga en servicio el tramo entre Puente San Miguel y Santillana.

A su juicio, el tramo inaugurado hoy es "una espléndida carretera", que forma parte de los planes del Gobierno regional para mejorar la red varia autonómica, planes que en los últimos años han permitido mejorar el estado de 2.000 kilómetros.

La carretera inaugurada enlaza la Variante de Santillana del Mar con Suances, es un tramo de 7,6 kilómetros de longitud que ha supuesto una inversión del Gobierno regional de 12,5 millones de euros.

Revilla ha estado acompañado en el acto inaugural por el consejero de Obras Públicas, Ordenación del Territorio, Vivienda y Urbanismo, José María Mazón, y los alcaldes de Santillana del Mar y Suances, Isidoro Rábago y Andrés Ruiz Moya, respectivamente.

La actuación hoy inaugurada forma parte de la variante Puente San Miguel-Santillana del Mar-Suances, cuyo presupuesto global asciende a 25 millones de euros.

El proyecto ha contemplado la construcción de dos nuevos tramos y la mejora de otro ya existente.

El primero de los de nueva creación, de 4,750 kilómetros entre la CA-131 (Barreda-La Revilla) y Tagle, forma parte de la Variante de Santillana (CA-136) y el segundo, de 1,2 kilómetros y que une el anterior con la CA-351 (Santillana-Suances), da lugar a la CA-137.

Por su parte, el tramo mejorado es el que conecta la Variante norte de Santillana con la intersección con la CA-131, con una longitud de 1,680 kilómetros.

A lo largo de todo el trazado se han habilitado dos carriles de 3,25 metros de anchura y arcenes a ambos lados de 0,75 metros.

Asimismo, se han levantado aceras puntuales en zonas urbanas y se han instalado cunetas en forma de "V" revestidas de hormigón.

Entre otras estructuras, destaca el paso superior de 17 metros de longitud ejecutado en Tagle. En este punto la anchura de los carriles se reduce a tres metros, pero en ambos lados se han levantado aceras de 1,50 metros.

Una de las peculiaridades del proyecto es la utilización de un aglomerado asfáltico ecológico para la capa de rodadura, fruto de los estudios llevados a cabo por la Dirección General de Carreteras del Gobierno regional, la Universidad de Cantabria y la empresa Emilio Bolado.

Este nuevo aglomerado emplea un porcentaje de sustitución de árido natural por árido siderúrgico superior al 80 por ciento y, entre sus características técnicas, destaca su resistencia al desgaste, lo que influye en el aumento de la vida útil de la carretera, y un alto coeficiente de agarre de los vehículos.

EFE-Cantabria 1010513