El grupo municipal regionalista en el Ayuntamiento de Santander ha agradecido el trabajo y compromiso de los trabajadores del servicio de limpieza viaria y recogida de basuras que, ante el escenario de incertidumbre generado por la gestión de la alcaldesa en el conflicto de las basuras, han sabido mantener la calma y demostrar su implicación con la ciudad frente a los inconvenientes sobrevenidos por la falta de previsión del actual equipo de gobierno.

“Es bochornoso que la alcaldesa anuncie que la ciudad estaba preparada y que el servicio estaba asegurado y los trabajadores hayan tenido iniciar la jornada laboral con las calles totalmente sucias y los contenedores llenos sin el material ni maquinaria adecuada para poder realizar su servicio”, indicó el portavoz regionalista, José María Fuentes-Pila.

Asimismo, ha calificado de absoluta “falta de respeto” que se les haya tenido al margen de la situación sin informales de las condiciones en las que se encontraba la nueva adjudicataria para asumir el servicio, en cuanto a equipamientos y material, o de la situación de subrogación de la plantilla de trabajadores, teniéndonos que enterar en la prensa de una serie de dificultades con la anterior adjudicataria, apenas 24 horas de producirse el traspaso.

Fuentes-Pila ha remalcado la falta de “transparencia” y “comunicación” por parte de la alcaldesa con la oposición en todo el asunto del traspaso en la gestión de las basuras de la ciudad con la nueva adjudicataria, Cespa, un oscurantismo que no es la primera vez que denuncia su formación, tanto en ésta como en pasadas legislaturas y que forma parte ya de la idiosincrasia política del PP”, pero , -apunta,- ahora estamos hablando de unos de los contratos más cuantiosos y que de manera más directa afecta a todos los santanderinos. “Desde su origen, con la redacción de los pliegos, y su política de recortes y más tarde con su negativa a una comisión de investigación, el Partido Popular es responsable de que actualmente la ciudad esté como está, un auténtico asco y patas arriba”.

Por ello consideran que debiera constituirse una comisión de seguimiento en la que estén representados los grupos municipales y el comité de empresa, y donde se informe de la situación en la que se encuentra el servicio, y de qué manera se van atajar los déficits actuales “ya que nos asaltan ciertas dudas en la manera en la que se va a comprobar la correcta y completa implementación del nuevo servicio así como el cumplimiento del contrato a fin de que exista una efectiva fiscalización del mismo”.