El portavoz del Grupo municipal regionalista, José María Fuentes-Pila, ha opinado hoy que el anuncio realizado por el alcalde de Santander, Iñigo de La Serna, de que el Ayuntamiento de Santander asumirá la construcción del centro cívico de Cazoña constituye en realidad un “fracaso personal” del regidor, que vuelve a “consentir un nuevo incumplimiento” del Gobierno de Cantabria con Santander y los santanderinos.

“Ahora, De la Serna  trata de vendernos su propio fiasco como un favor a los vecinos”, ha lamentado Fuentes-Pila, quien ha considerado “lamentable” que durante tres años el Ayuntamiento de Santander y el Gobierno de Cantabria, de “igual signo político”, no hayan sido capaces de sacar adelante un proyecto “imprescindible y prometido durante años a los vecinos” del barrio. Así, considera que desde que Ignacio Diego asumió la Presidencia del Ejecutivo cántabro “no ha cumplido ni una sola de las promesas realizadas a los santanderinos, con el agravante de contar con el silencio cómplice de este alcalde consentidor”.

En este sentido, el portavoz de los regionalistas considera que el regidor ha faltado a su palabra con los vecinos, a quienes tratar ahora de “marear con un brindis al sol, sin plazos ni presupuestos”.

En este punto, ha recordado que tanto la titularidad de la finca C-14 donde se prevé construir el centro cívico como el proyecto que resultó ganador del concurso de ideas convocado al efecto pertenecen al Ejecutivo cántabro, por lo que los plazos “vista la estrecha relación entre ambas administraciones” en ningún caso “se iniciarán las obras antes de que acabe esta legislatura”.

Por otra parte, Fuentes-Pila lamenta que De la Serna, “que se mostraba tan reivindicativo” en otras épocas, se dé por satisfecho ahora con un proyecto “de rebajas”, que, según se ha detallado a los propios vecinos, tendrá menos dotaciones que el proyecto que resultó ganador del concurso de ideas.. “Este es sólo otro ejemplo más de que la lucha de egos entre Diego y De la Serna y la incapacidad de este último de cumplir sus promesas tiene un alto coste para los santanderinos”, ha finalizado.