El grupo municipal regionalista en el Ayuntamiento de Santander ha vuelto  a denunciar la actitud “reincidente” del equipo de gobierno  de no dar cumplimiento a otro acuerdo plenario, en esta ocasión adoptado en julio de 2020 y referente a la convocatoria de forma inmediata la Comisión Mixta del Cabildo para trazar una hoja de ruta urgente que marque el presente inmediato del cabildo de Arriba.

El portavoz regionalista ha mostrado su indignación tras haber transcurrido un año de dicho acuerdo y dicha comisión mixta “no solo no se ha reunido” sino que el barrio acaba de perder un edificio más, el número 17 de la calle Alta, tras la demolición ya concluida por su estado de ruina.

“Es lamentable el pasotismo de PP y Ciudadanos con este barrio, que se encuentra situado apenas a unos pasos de la Plaza del Ayuntamiento, y que ya ha entrado en el limbo del olvido y del despropósito por parte de este gobierno”.

El regionalista recuerda que en la moción que llevaron a pleno y que salió adelante, solicitaban la adaptación y aprobación en el menor tiempo posible de una modificación puntual del PGOU que permitiese dar cobertura al Plan Especial de Protección y Reforma Integral (PEPRI) del Cabildo de Arriba, ya que a tenor de las circunstancias en las que se encuentra esta zona de la ciudad “no puede esperar a la aprobación de un nuevo plan general”.

Los regionalistas apuntaban que mientras que el plan general de 1997 se encuentra totalmente desfasado respecto a la Ley 2/2001 de Ordenación Territorial y Régimen Urbanístico del Suelo de Cantabria, el PEPRI está adaptado a dicha Ley, con lo que se puede tramitar conjuntamente con una modificación puntual del PGOU y aprobarse conjuntamente.

El portavoz regionalista insistió en que se debía, en primer lugar, paralizar cualquier intento de atentado urbanístico sobre nuestro Cabildo y, sobre esta premisa, activar los instrumentos necesarios para darle una solución definitiva al disponer en estos momentos de un PEPRI (Plan Especial de protección y Reforma Interior para la recuperación del Cabildo de Arriba) aprobado en julio de 2013 y que sufrió las consecuencias de la anulación del PGOU de 2012.

“El hecho que haya decaído no quiere decir que no pueda utilizarse ya que dicho documento contenía y contiene propuestas y análisis que en muchos aspectos están vigentes y son absolutamente viables tanto técnica como económicamente”, señala.

Ante el acelerado proceso de degradación del El Cabildo que resulta “tan evidente como alarmante desde hace años”, Fuentes Pila resaltaba que el Ayuntamiento, debe ser, de una vez por todas, “timón de la regeneración de este barrio” y, a la vez, el “dique de contención” que impida la especulación urbanística, desarrollando una gestión pública que anteponga el beneficio colectivo de los vecinos, de la ciudad en general, frente al beneficio de las empresas inmobiliarias en una zona tan golosa y a su vez tan sensible de la ciudad.

“A día de hoy en el Cabildo de Arriba, escasean las operaciones de mantenimiento y reforma urbana y dicha modificación puntual puede abrir un horizonte de esperanza, de oportunidades, de proyectos importantes”, donde el Ayuntamiento, y la empresa pública SVS, pueden influir decisivamente, generando un diseño social y urbanístico de primer orden y referente en política de regeneración urbana, en un barrio, que “hoy es más parecido a una zona de guerra que al núcleo originario de Santander”.

Precisamente  la solicitud de la convocatoria de forma inmediata de  la Comisión Mixta del Cabildo permitiría trazar una hoja de ruta urgente que marque el presente inmediato del cabildo de Arriba y la adopción en el menor tiempo posible de acuerdos con todas las administraciones implicadas.