Revilla afirma que Comillas fue “el proyecto del siglo hasta que el Gobierno de Diego se propuso acabar con él”

El PRC denuncia que el Ejecutivo del PP “ha hecho cuanto ha podido” para evitar su continuidad

Noticias PRC 20 Noviembre 2012

El secretario general del PRC, Miguel Ángel Revilla, ha hecho público su “pesar” por el “fin” del proyecto Comillas anunciado hoy por el consejero de Educación, una de las grandes actuaciones que puso en marcha su Gobierno y que estaba llamado a ser “el proyecto del siglo” para Cantabria, “hasta que el Ejecutivo de Ignacio Diego se propuso acabar con él”.

“Comillas no ha muerto, lo han enterrado sin siquiera darle una oportunidad quienes nunca creyeron en la idea y han hecho cuanto han podido para evitar su continuidad”, ha lamentado el líder regionalista.

A la espera de conocer los detalles del nuevo proyecto que pretende el Ejecutivo del PP para realizar una valoración en profundidad de lo ocurrido, Revilla ha lamentado las “mentiras” y los “datos falseados” difundidos hoy por el consejero Miguel Ángel Serna para “justificar su propio fracaso en un proyecto que encontró en marcha y bien encaminado, pero que por razones estrictamente políticas ha decidido no continuar”.

Asimismo, ha lamentado que Serna pretenda “vilipendiar” una iniciativa que no sólo fue promovida por el Gobierno de Cantabria, sino que llegó a ser declarada proyecto de Estado por el Gobierno de España y concitó el apoyo de las principales instituciones del Estado, como la Casa Real o el Instituto Cervantes, y de entidades tan relevantes como el Banco de Santander, La Caixa o Telefónica, entre otras.

“Decir que una Fundación en la que se han implicado desde el Rey de España al Instituto Cervantes pasando por Banco Santander, por citar solo a algunos de los patronos, es el resultado de una idea de bar es tomar por estúpidos a todos los cántabros”, ha respondido Revilla a las palabras pronunciadas esta mañana por el consejero.

A su juicio, Miguel Ángel Serna ha intentado “hacerle el trabajo sucio al presidente”, que es “el único culpable” de lo ocurrido y “ordenó desde su primer día de mandato acabar con el proyecto Comillas”, sin otra razón que “los celos políticos” y la identificación de esta iniciativa con el Gobierno que le antecedió.

Para Revilla, el de hoy es “un día muy triste”, porque “Comillas y toda Cantabria pierden la gran oportunidad que tuvieron al alcance de la mano para convertirse en la gran referencia internacional para el estudio del español, aprovechando todas las oportunidades económicas derivadas de la industria del lenguaje”.

Finalmente, ha confesado su “frustración” al comprobar que la antigua Universidad Pontificia no llegará a ser “el gran foco de la lengua y la cultura hispana por culpa de un Gobierno mediocre e irresponsable, al que le han faltado ambición, convicción y altura de miras para continuar el proyecto más relevante de cuantos ha tenido planteados Cantabria en los últimos años”.