El PRC de Santander critica el “chapucero” apaño del Ayuntamiento con los soterrados averiados

Tanto en el centro urbano como en zonas como Valdenoja  prácticamente se han precintado todos los soterrados, pasando a ser sustituidos por contenedores de plástico, algunos en “mal estado”

1 Junio 2022
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El portavoz del grupo municipal regionalista en el Ayuntamiento de Santander, José María Fuentes-Pila, ha criticado la “chapucera” solución tomada en cuanto a los contenedores soterrados dispuestas en la ciudad que se encuentran fuera de servicio por avería desde hace meses.  

 

Como indica el último informe emitido por la empresa encargada del control de la gestión del servicio de basuras, los soterrados averiados han sido vaciados para pasar a ser precintados, algo que en muchos casos no es así y en su lugar, se ha dispuesto un contenedor de plástico en superficie, que como en la calle Doctor Diego Madrazo, están “deteriorados”. “Parece que la política de la empresa concesionaria, entendemos que a órdenes de este equipo de gobierno, ha decidido prescindir del soterramiento y optar por esta medida en lugar de proceder al arreglo de los mismos, máxime cuando en el pliego se recoge la obligación de ello, por lo que estaríamos ante un claro incumplimiento”, apuntó Fuentes-Pila.

 

Según recoge textualmente dicho pliego, “los licitadores deberán prever en sus respectivas ofertas los costes del mantenimiento integral de la contenerización soterrada tanto a nivel de infraestructuras de obra civil como de elementos mecánicos de elevación, circuitos hidráulicos, alimentación eléctrica, vertidos ..etc y en caso de necesidades sobrevenidas deberá solucionar la anomalía detectada en un plazo máximo de 24 horas”.

 

El regionalista recuerda que a principios de años el PRC ya alertaba de que casi el 40% de los contenedores soterrados de la ciudad no estaban en funcionamiento mientras desde el equipo de gobierno se miraba a otro lado en cuanto a la obligación de que esos contenedores se reparen en el menor tiempo posible. “Ahora resulta que la solución dada pasa por esta ocurrencia que denota no solo una mala imagen para la ciudad sino un pésimo, en la mayoría de los casos, servicio para los santanderinos”.