El grupo municipal regionalista en el Ayuntamiento de Santander ha instado al equipo de gobierno a que se interese por la adhesión al convenio suscrito recientemente entre el Ministerio de Sanidad y la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) por el que Sanidad abonará 1.440.000 euros a las entidades locales con el objetivo de llevar a cabo acciones que promuevan la salud de los ciudadanos.

El portavoz regionalista, José María Fuentes-Pila, animó a PP-Cs a que no desaprovechen esta oportunidad dada la importancia que representa la presencia de la salud en las políticas municipales.

En este sentido, recordó que no solamente el Ayuntamiento tiene competencias para actuar en esta área sino que hacerlo constituye una obligación. Por ello el PRC lleva mucho tiempo reclamando una Unidad de Educación para la Salud como el instrumento "imprescindible" en la articulación de una política de salud pública efectiva, que establezca el “diagnóstico”, las líneas de “intervención” y la “evaluación” de éstas en torno a las principales necesidades en materia de Salud Pública.

"En 2009 conseguimos una aportación económica de 30.000 euros para la Unidad de Educación para la Salud pero el equipo de gobierno retiró esa aportación un año después. Lo hemos llevado por dos ocasiones más a pleno hasta que ahora finalmente y en pleno contexto de pandemia donde ha quedado más que evidente la necesidad de contar con políticas preventivas en materia de salud, dentro de las aportaciones al II Plan de Choque hemos conseguido que se dote a esta unidad con 150.000 euros”.

Igualmente apuntó que desde 2007 y a instancias del PRC, también se creó un grupo  de Expertos en Prevención de Drogodependencias al objeto de aglutinar el mayor número de agentes implicados en este tema para la elaboración de programas de prevención y foros de debate que estableciesen políticas reales en todo lo referido a las drogas.

Para el regionalista, Santander ha sido ejemplo de que la falta de voluntad política está relacionada con la ausencia de conciencia social sobre la importancia de la promoción de la salud ya que durante todo este tiempo las tareas municipales asumidas en el ámbito de la salud han sido "puramente informativas" y no han incluido programas que recojan las necesidades de los ciudadanos.

Precisamente ahora con convenios como el suscrito entre el Ministerio y la FEMP, se recogen una serie de prioridades en  salud pública a llevar a cabo por las entidades locales en clara sintonía con las propuestas que “los regionalistas llevamos tiempo reclamando para Santander” y que la propia Organización Mundial para la Salud (OMS) avala en lo relativo a control y prevención del tabaquismo, la prevención del consumo de alcohol con especial énfasis en los jóvenes, la promoción de una alimentación adecuada así como identificar, coordinar y potenciar los recursos comunitarios para la promoción de estilos de vida saludables, y facilitar las condiciones estructurales municipales para lograrlo.