El Grupo Municipal Regionalista en el Ayuntamiento de El Astillero sigue insistiendo en que el problema de la dureza del agua que reciben en las casas los vecinos de El Astillero tiene solución, y no una sola, si no hasta tres posibles tal y como apunta el informe que ha remitido Aquagest, la empresa concesionaria del servicio municipal del suministro de agua al alcalde, el pasado 15 de mayo.

En sentido, han indicado que en una reunión mantenida el día 3 de abril entre los técnicos de la Consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria y la empresa Aquagest, se plasmaron distintas alternativas.

Los regionalistas explican que la primera opción consiste en mezclar al 75% el agua de la Autovía del agua, procedente del Plan Asón, con el agua que llega actualmente a la estación depuradora del Plan Villaescusa-Astillero y que se proviene de las captaciones de Santa Ana y Fuenvía, origen del problema de la cal en el agua. Para esto sería necesario instalar unos 200 metros de tubería, con un presupuesto estimado de 40.000 €, según se nos informó en la Comisión de Urbanismo.

Una segunda opción, sería realizar un aporte complementario desde Aguas de Santander, esto implica una negociación entre el Ayuntamiento de Santander y la Consejería de Medio Ambiente, teniendo en cuenta  que actualmente está en vigor un contrato para el suministro mínimo de 75.000 m3 al mes.

La tercera opción sería de carácter provisional, hasta que se opte por una de las dos anteriores, y plantea suministrar a Astillero únicamente el agua del manantial de Santa Ana y desechar el de Fuenvía, que es que mayor dureza aporta a la depuradora ubicada en Liaño. Esta opción mejoraría sólo parcialmente el problema porque el agua de Santa Ana tiene una dureza según analíticas de laboratorio de 20 grados franceses, el doble de lo que sería aceptable para un agua de calidad.

En cualquiera de los casos, el PRC quiere dejar claro que la solución viene de la mano de la Consejería del Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria, y en este punto es “donde queremos ver una actitud más activa y reivindicativa del Alcalde de Astillero, en defensa de la petición legítima de los vecinos del municipio para recibir un agua de calidad, con un nivel de dureza aceptable, y que no obligue a los vecinos a instalar descalcificadoras con un coste que ronda los 1.200 € por cada vivienda”.