Torrelavega quiere ser pionera en Cantabria en la implantación del quinto contenedor marrón

El Ayuntamiento ha propuesto al Gobierno de Cantabria ser el primer municipio de la Comunidad en implantar el quinto contenedor marrón, específicamente orgánico, en el que se recogerían todos los residuos destinados a la generación de compost.

29 Marzo 2017

El equipo de gobierno propone un modelo de gestión pública en el Servicio de la Recogida de Residuos e iniciará un debate social y político en virtud del que se tomará una decisión antes del último trimestre de 2017.

El Ayuntamiento de Torrelavega ha propuesto al Gobierno de Cantabria ser el primer municipio de la comunidad en implantar el quinto contenedor marrón en la recogida de residuos, específicamente orgánico, en el que se recogerían todos los residuos destinados a la generación de compost, es decir, residuos alimenticios y biodegradables, que no necesitan ser destruidos ni incinerados y son reciclados de forma natural.

La propuesta que el consistorio torrelaveguense le ha hecho llegar a la Consejería de Medio Ambiente, hace dos semanas, ha sido anunciada esta mañana por el concejal responsable del área, que ha explicado que está motivada por varias razones;  se trata de una Directiva de la Unión Europa y constituye una cuestión beneficiosa para el medio ambiente, que puede suponer un ahorro para las arcas municipales, ha dicho.

En este punto el edil ha explicado que actualmente la recogida de residuos le supone al Ayuntamiento de  Torrelavega un coste de 3 millones de euros al año, de los cuales 1,5 millones corresponden al coste en sí del servicio de recogida y la otra mitad corresponde coste de la gestión de los residuos, vertido en el vertedero y tratamiento posterior; un coste, este último, que, estima, se abarataría.

Otras de las ventajas, que según el concejal conlleva la implantación del contenedor marrón en la ciudad -además de conseguir una recogida selectiva mejor si cabe que la actual- es que se reduciría el número de contenedores en la vía pública, porque se llevaría  a cabo una reorganización de las ubicaciones  con la creación de “islas verdes” donde estén los cinco contenedores de forma más localizada y menos disgregada por la ciudad. “Los cinco contenedores de reciclaje selectivo pero en menos puntos de la ciudad”, ha indicado.

Para llevar a cabo esta recolocación se iniciaría, ha explicado el edil, un estudio que determine las zonas estratégicas para crear esas “islas verdes”.  “No tiene porqué implicar que haya más contenedores sino que algunos de los verdes actuales pasen a ser marrones, con una recogida más diferenciada”. En cualquier caso ha asegurado que no se perderán plazas de aparcamiento. 

Para el edil este es el momento de iniciar el debate sobre la recogida de residuos porque el próximo mes de diciembre finaliza el contrato de la empresa que actualmente está prestando este servicio.

“Entendemos que es el momento de empezar a definir el futuro de la implantación de este quinto contenedor, y que Torrelavega sea pionera en esta materia, primero iniciando una experiencia piloto en una zona de Torrelavega, para posteriormente ir implantándolo de forma progresiva en toda la ciudad, y tenerlo plenamente implementado en 2020”, ha señalado.

Modelo de gestión Pública y directa por parte del Ayuntamiento

En este sentido, además de abordar la implantación del quinto contenedor marrón el edil ha anunciado que el equipo de gobierno va a iniciar el debate con el resto de fuerzas políticas del Ayuntamiento de Torrelavega sobre el modelo de gestión del Servicio de recogida de residuos;

“Entendemos que el modelo de gestión de este servicio tiene que ser público y gestionado de forma directa por el Ayuntamiento de Torrelavega” ha manifestado, dejando clara la propuesta y la postura del equipo de gobierno municipal en el debate que iniciará con el resto de fuerzas políticos en los próximos meses sobre esta cuestión, un tema que se tratará, ha indicado, en las mesas de trabajo que desde este momento se van a crear con el resto de grupos de la oposición.

El edil ha remarcado que, si bien esas decisiones se tomarán en los próximos seis meses y trabajaremos con los grupos políticos, además “también queremos, ha dicho, que las cuestiones referidas a la mejora del servicio sean una decisión de la ciudad y llevaremos a cabo un proceso de participación ciudadana, llamando a los colectivos vecinales, comerciantes,  hosteleros, para definir la gestión de residuos”.

El concejal se ha mostrado convencido de que “la posibilidad de un modelo de gestión directa municipal será una decisión de mayoría absoluta muy amplia dentro de la corporación, pero, ha recordado también dependerá de las cuestiones jurídicas y legales de la legislación actual”, por lo tanto, ha dicho, “no podemos descartar que el modelo de gestión siga siendo de forma indirecta”.

En cuanto a los plazos, ha explicado, “la decisión estará tomada antes del último trimestre de 2017 para que desde principios de 2018 podamos empezar a trabajar en esas dos vertientes; en el modelo de gestión y en la gestión de esa recogida selectiva con la implantación del quinto contenedor”.

Además de esto, ha añadido, se plantearán otras cuatro cuestiones para mejorar el servicio: La recogida puerta a puerta del vidrio y del aceite a los hosteleros; también se propondrá mejorar la recogida de los enseres voluminosos incorporando con total garantía la recogida doméstica de los electrodomésticos de todo tipo, frigoríficos, neveras, televisores equipos de música, equipos informáticos, etc.; La creación de puntos limpios móviles en los que recoger todo tipo de residuos, que ha planteado algún colectivo en los últimos meses, ha comentado el edil.  

Por último, preguntado por los periodistas sobre la posibilidad del soterramiento de los contenedores, el edil ha explicado que un informe del Ministerio de Medio Ambiente lo desaconseja porque puede generar malos olores, se generaría mucho tráfico porque se prolongaría el tiempo que dura la recogida de los contenedores por parte de los camiones de basura, y supone un sobre coste, tanto por las obras a ejecutar como por la recogida en sí.