El grupo municipal regionalista en el Ayuntamiento de Santander ha presentado una batería de propuestas de modificación del Reglamento orgánico del pleno, a través de las cuales, pretende modernizar dicho documento en una clara apuesta por aumentar la fiscalización sobre el gobierno y reforzar el turno del ciudadano.

Dichas propuestas que serán debatidas en la próxima Comisión de Participación ciudadana pretenden, señaló el portavoz regionalista, José Maria Fuentes-Pila, dotar al Reglamento de una mayor “democratización” incrementado los mecanismos de participación, logrando un mayor control del gobierno, mejorando la transparencia e introduciendo las nuevas tecnologías en el ámbito del trabajo municipal”.

Para un mayor control del gobierno, las modificaciones propuestas por los regionalistas pasan por  la creación de una comisión de investigación sobre asuntos relacionados con el funcionamiento y la actividad municipal en la que podrán comparecer los titulares de los órganos, empleados /as del ayuntamiento y entes dependientes así como personas relacionadas directamente con los hechos objeto de la investigación. Igualmente se ha propuesto la inclusión de una sesión extraordinaria sobre el estado de la ciudad con carácter anual  en la que el equipo de gobierno expondrá su parecer sobre la situación general de la ciudad y sus propuestas de gobierno y los portavoces de la oposición podrán intervenir al respecto.

En materia de participación, el portavoz regionalista apuntó que con las modificaciones planteadas la sesiones plenarias serán más “dinámicas” y “participativas”, introduciendo nuevas medidas que el actual documento no recoge, como la posibilidad de que “se presenten a pleno las propuestas de acuerdo de los consejos de distrito para debate y votación” así como que “las sesiones de las comisiones sean públicas y con la posibilidad de que representantes de entidades ciudadanas puedan acudir”.

Y es que en este sentido los regionalistas recogen incluir la opción de que los vecinos presenten ruegos, preguntas e interpelaciones así como que las propuestas acordadas por el Consejo de un distrito se eleven al pleno siempre y cuando sean sobre temas de interés general de la ciudad y competencia del Pleno. Igualmente plantean aquellos ciudadanos que gocen de derecho de sufragio y asociaciones y organizaciones inscritas en el registro municipal puedan presentar iniciativas dirigidas al pleno o participar como interesados.

Por último, al objeto de favorecer el acceso a la información y la modernización de la administración los regionalistas apuestan por la incorporación progresiva de medios tecnológicos en lo referente a las convocatorias de dicho órgano, publicidad y expedientes así como la posibilidad del voto telemático “en bajas de maternidad o paternidad o enfermedades graves para evitar que un grupo pierda un voto”.

El hecho de que los portavoces puedan ser asistidos por algún asesor de su grupo en las Juntas de portavoces o delegar su asistencia a las mismas en otro concejal/a o la limitación de dos propuestas para debate y votación al pleno por cada grupo bien propias o conjuntas con otros grupos, son otras de las modificaciones sugeridas.