El Partido Regionalista de Cantabria ha denunciado hoy que los presupuestos del Estado para 2018 “no garantizan” la financiación a la dependencia y que Cantabria “reciba lo que le corresponde”. 

La diputada regionalista Rosa Valdés se ha pronunciado en estos términos durante el debate de la moción presentada por el Grupo Regionalista para “exigir partidas finalistas que garanticen el equilibrio económico” que necesita el sistema, ya que actualmente su coste lo aguanta el Gobierno regional al abonar el 84% de su implantación. 

En este sentido, Valdés ha calificado de “raquítica” el incremento de 46 millones de euros previsto en el Presupuesto porque “no garantiza la sostenibilidad futura de protección de los más vulnerables” y “no reconoce el coste real del sistema de la dependencia” en Cantabria, que acumula una deuda de 208 millones de euros. 

“Esta es la cifra de la deslealtad del Gobierno del Partido Popular con las personas dependientes de Cantabria y sus familias desde que los ‘populares’ decidieron que era insostenible atender a las personas más vulnerables”, ha subrayado. 

Pero frente a la actuación del PP, la diputada regionalista ha apuntado el “esfuerzo” del Ejecutivo de Miguel Ángel Revilla para “reverter” la gestión ‘popular’ que se dedicó a “dilapidar una herencia de trabajos en los servicios sociales públicos que nos situó en la cabeza de España”. 

Así, ha recordado que el PP rebajó horas de atención a domicilio y de teleasistencia;  aumentó el copago; modificó los grados y niveles: incompatibilizó prestaciones; y endureció el baremo desplazando a los que antes eran dependientes severos hacia los grados de menor intensidad que no incorporaron hasta 2015. 

Una gestión, ha dicho, que difería de la realizada por los anteriores ejecutivos del PRC-PSOE que “se empecinó en implantarla, desarrollarla y protegerla”.